jueves, 20 de julio de 2023

Cuando la tipología salta por la ventana... o la importancia del conocimiento de la cultura material en las investigaciones arqueológicas 😅


Periódicamente y, en especial durante los veranos, los informativos nos ilustran con los últimos hallazgos de las investigaciones arqueológicas.
Es el caso de las excavaciones de Auritz/Burguete (Navarra) de las que nos da cuenta, en este caso, EITB, a través de su Teleberri.
En este municipio del viejo reino, en el trazado de la calzada romana, se ubican los restos de una ciudad de esta etapa cultural, con un largo desarrollo temporal, abarcando varios siglos de aquel imperio.
Uno de los hallazgos materiales llama la atención: una pieza de bronce (no se menciona este detalle) que, en el informativo, obviamente a sugerencia de la responsable de las excavaciones, a cargo de la Sociedad de Ciencias Aranzadi/Zientzi Elkartea, se identifica como "un sumidero".
Alguien ha debido encontrar un remoto parecido con la tapa/filtro de un desagüe y se ha quedado conforme con la ocurrencia...
Lamentablemente no se trata de un sumidero, sino que es parte del arreo de un caballo, concretamente uno de los discos decorados del freno. Los calados decorativos, aparentemente una arquería, se han tomado como los agujeros del "sumidero", sin tener en cuenta la perforación central, por donde pasaría la barra del bocado que iba, propiamente, en la boca del equino de turno y la argolla lateral donde iría una de las correas de cuero de la cabezada.
No es una pieza baladí, por varios motivos: primeranente, aporta una cronología postquem bastante concreta, siglos IV-V d.C. (época tardorromana) que debiera ser concordante con el registro estratigráfico donde ha aparecido. 
En segundo lugar aporta una valiosa información, fue la posesión de alguien "con posibles" en la sociedad de aquella época, un militar o otro funcionario, un equites, en cualquier caso.
Éste tipo de hallazgos no son infrecuentes en otros contextos tardorromanos peninsulares, como es el caso, por ejemplo, de las necrópolis o cementerios de inhumación del tipo Simancas-San Miguel de Arroyo.
Una simple consulta al catálogo de MAN arroja paralelos bastante razonables para esta pieza de Auritz/Burguete...
La moraleja, aunque suene viejuno, es que para excavar una ciudad de época romana se necesita un equipo pluridisciplinar, obviamente con especialistas en estratigrafía, en contextos urbanos, etc. Y, desde luego por decimonónico que parezca, especialistas en cultura material y tipologías de aquellas épocas.
No es por hacer sangre, pero es necesario recordar que, en un primera instancia, la muy conocida "mano de Irulegi" (hallazgo a cargo igualmente de Aranzadi) y, de hecho una tessera, fue identificada como el remate de un casco (que no estaba exenta de fantasía semejante atribución) y hubieron de transcurrir largos meses hasta que, ya en el laboratorio, los restauradores descubrieron las inscripciones, que no se veían obviamente bajo las costras y concreciones. Si, por el contrario, se hubiera identificado correctamente en campo se habría podido adaptar la estrategia de excavación más adecuada para aquel contexto. Pero, como decía aquel camarero del rancio celuloide: "esa es otra historia..."
https://www.eitb.eus/es/noticias/sociedad/videos/detalle/9269822/los-objetos-hallados-en-yacimiento-de-zaldua-confirman-que-asentamiento-romano-duro-al-menos-4-siglos/

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